El abogado especialista en derecho ambiental y director ejecutivo del Instituto de Abogados para la Protección del Medio Ambiente (Insaproma), Euren Cuvas Medina, en calidad de vocero de los reclamantes, advirtió al ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Ángel Estévez que de no entregar de inmediato los informes podría ser sometido ante la Justicia por desacato y prevaricación.

Informó que la sentencia del Tribunal Constitucional No.0511/18, de fecha 3 de diciembre del año 2018, ordena la entrega de los informes que desde hace alrededor de un año le solicitaron a ese Ministerio sobre el derrame de petróleo causado por el mal estado del oleoducto que conduce combustible desde Quita Sueño, municipio de Haina, en la provincia de San Cristóbal, hasta las instalaciones de la planta de Falcondo, en Bonao, provincia Monseñor Nouel.

Indicó que a raíz del derrame ocurrido el 23 de agosto del año 2017, en el barrio Valle Encantado de Quista Sueño, los afectados solicitaron al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales que les entregara el informe de impacto ambiental del derrame, el informe sobre el estado del oleoducto y el informe sobre su mantenimiento.

El abogado explicó que el Ministerio de Medio Ambiente y de Recursos Naturales se negó a entregar estos informes solicitados de acuerdo a la Ley de Libre Acceso a la información Pública, por lo que tuvo que solicitarlos a través de un amparo ante el Tribunal Superior Administrativo.

Este tribunal declaró inadmisible el recurso de amparo mediante la sentencia número 030-02-2008-SSEN-00043, de la primera Sala, en fecha 8 de febrero de 2018. 

Manifestó que con la publicación de estos informes será imposible mantener en funcionamiento este oleoducto por constituir una amenaza para todas las comunidades que abarca su trayecto.

“El derrame del 23 de agosto de 2017 no fue un accidente aislado, sino el resultado del deterioro de esta tubería por haber caducado su vida útil”, observó.

Recordó que este derrame en Quita Sueño, es el tercero que ocurre desde que se construyera en el año 1970 este oleoducto que recorre 72 kilómetros. El primero de estos derrames sucedió en año 2002 y el segundo, también en Villa Altagracia, el 9 de agosto de 2008.