Por el hecho de que haya enfatizado la necesidad de alfabetizar para disminuir la violencia, no es que estoy ni mucho menos sugiriendo que los principales culpables de la situación que estamos sufriendo, sean los iletrados, de ninguna manera. Yo lo que estoy haciendo es aprovechar este espacio para motivar a todas las personas de buena voluntad que pongan manos a la obra patriótica de enseñar a los que no saben.

A diario recibimos expertos en la materia, pero como ahora se habla de poner el otro oído en el pueblo llano, yo que soy de ese pueblo llano he querido dejar oír mi parecer acerca de la violencia y el cómo combatirla.

El señor Presidente de la República actúa sabiamente al situar como prioridad uno la educación de sus conciudadanos. La inversión en educación es la que mejor y más rápido beneficio produce.

Las últimas pensiones han puesto de relive la necesidad de una profunda revisión y modificación de la ley de jubilaciones y pensiones.