Cada cuatro años, y particularmente el 26 enero posterior a la juramentación de autoridades municipales, la sociedad dominicana lee, mira y escucha opiniones sobre quién será el nuevo secretario general de la Liga Municipal Dominicana. Aparece la opinión de cerrar el organismo o cambiarlo. Cambia o sigue igual. Los candidatos propuestos por los partidos, o los que se autoproponen, lanzan mensajes de nuevas acciones, aunque muy pocos o ninguno marcan con claridad meridiana las estrategias, planes, programas y proyectos para alcanzar el cambio institucional.