El investigador sostuvo que a diferencia del mabí producido por la fermentación del palo de Bejuco de Indio, en este nuevo proceso se evita que algunos hongos y bacterias que producen toxinas sean parte del producto final, garantizando su salubridad y calidad. "Cuando tú haces ese desarrollo puedes controlar a la perfección tu proceso de fermentación...pones un microorganismo de manera controlada a fermentar y no va a haber microtoxinas, ni toxinas bacterianas, porque cuando se pone el palo a fermentar entran en competencia cinco levaduras, algunos hongos y como tres o cuatro bacterias; todo eso puede producir toxinas que, aunque los microorganismos mueran, quedan las toxinas que pueden hacer daños", significó el empresario e investigador Aybar.