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Al César lo del César

Cuando un periodista asiste a cubrir, una actividad, un evento, percatándose de cada detalle, ocurrido en esa actividad, hace sus entrevistas de lugar, llega a su casa a vaciar el contenido de esas gravaciones y procede a trabajar la noticia, cuidando cada regla , todos los aplicando signo de puntuación, lo edita lo lee una y otra vez, y procede a enviarlo a los distintos medios de comunicación que darán publicidad a esa noticia.

Es una satisfacción para el profesional de la pluma, ver su trabajo, publicado y los comentarios que este pudiese levantar en los lectores, es de suma importancia, para un periodista, que escribió, con el alma, un articulo, un reportaje, una noticia, saber que sus créditos serán respetados, como autor de ese trabajo.


Pero cuando me percato, que en solo minuto, mi esfuerzo fue, ignorado y que ni siquiera, se tomó, en consideración en dar a conocer la dueña de ese trabajo, me tengo que molestar, porque todos los asistentes al evento que tu has cubierto te preguntan al otro día, por la nota que se presume escribiste, dejando a uno en vergüenza, delante de los lectores que te siguen, en donde ellos piensan que fuiste allí hacer un bulto, porque te vieron escribiendo y tu firma, jamás apareció en ninguna nota.


Lo mas normal, es que aparezca el nombre del dueño del articulo, porque esperas, que aparecerá en los medios que fueron mandados tus trabajos, pero no sucede así, porque es mas fácil, tomar un nota ya realizada, que pagar a un periodista un servicio prestado de Relaciones Publicas, lo cual casi nadie hace, porque los comunicados de prensa, no se firman, por eso es que protesto, porque si van a mandar un comunicado, para que entonces los periodistas cubren eventos.


Protesto en todos los foros, que mi trabajo y el de los colegas debe ser respetado, dándoles la misma importancia, a los que los periodistas cubrieron ese evento y no es justo, que después de desvelarse, para que las notas queden perfectas, aparezca un Juan de los palotes, a echar por tierra tu trabajo, tu esfuerzo, tus conocimientos, tiempo, luz, internet y además,  ni siquiera, las gradas te dan.


Estoy indignada, no herida porque son muchas las notas que escribo a diario y no estoy mendingando un nombre una firma, estoy exigiendo un derecho propio, que como profesional y civil tengo, no estoy molesta, porque ignoraron mi nombre en una nota que escribí con el corazón, estoy furiosa, por la falta de respeto, de aquellos que piensan que por ser periodista de un medio digital, los impresos, son los que cuentan.


Estoy furiosa, porque cuando me sacan una publicación fuera de contexto, me molesto, porque seria incapaz, de copiar algo ajeno y no citar la (FUENTE, y no citar el dueño de la publicación robada  plagiada y copiada porque hasta un ignorante va a decir "Pero eso lo, escribí yo, y mi nombre donde esta?.


Tal vez los lectores no imaginan, lo que debe hacer un periodista, para hacer una nota de excelencia, donde tenemos a veces que ingeniárnosla, porque el orador dijo un disparate y hay que hacerlo lucir bien, para no dañarle la nota y la actividad, sacando siempre debajo de las mangas, para que tu trabajo quede impecable y bien redactado.


No estoy reclamando algo que no es justo, reclamo hasta en el cielo, lo que trabajé, reclamo, por tantas horas de estudios, con velas, con hambre, que tuve que pasar para ganarme en la universidad este titulo, porqué tengo que vivir de lo que se hacer, de aquello en donde invirtió mi hermano Donato Valdez, en la Universidad Central del Este (UCE) tantos miles de pesos, para que yo cumpliera mi sueño de ser periodista realmente lo que quería ser de niña, porque nunca desee estudiar otra carrera universitaria.


Y que nadie me diga que eso no importa, que mi nombre se ignorara, eso si, importa, porque mis derechos los defiendo, hasta en la China, porque fueron muchas las páginas que tuve y tengo que tirar  para la izquierda, para lograr una noticia perfecta, y si mi nombre no es importante, pues que lo escriban  ellos, aquellos que no consideran a los periodistas, a la hora de mandar su comunicado de prensa, hecho por el mismo profesional, aquellos que ignoraron, que me hicieron sentir nada.


Hoy reclamos por mi y por aquellos colegas que se  han perdido, hasta su vista 20/20 que tenían,  pegado a una maquiniquilla, una computadora y leyendo, para perfeccionarse y ser mejor día tras día, hoy reclamo molesta, por esos periodistas de barrio, de pueblo, de la ciudad, aquellos que cada instante se han sentido al igual que yo, desconsiderados y abusados.


Porque solamente estoy escribiendo, para que sepan, que los y las periodistas, tiene su valor, aunque ni tan siquiera, recibamos una llamada, un correo electrónico, después de pasada su actividad, diciendo la palabra "Gracias", por la ayuda, porque es muy bueno y mas fácil, Pelar, para que otro chupe.

Este artículo también fue publicado en borinqueya.net

 

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