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Tres candidatos que existen para un partido que no existe

Si algo tenemos de sobra en la República Dominicana son personajes dedicados a la actividad política que dicen aspirar a ejercer el cargo de Presidente de la República.

En este país, casi todo el que llega a un cargo público o privado de cierto éxito, de inmediato comienza a escuchar a su alrededor una cantidad de voces susurrando lo inteligente que es, el liderazgo que tiene y la necesidad de que llegue a ser el "jefe"de todos los dominicanos.
Existe una regla de oro para medir el ego de los políticos: su aspiración a ser Presidente es directamente proporcional a la cantidad de ¨pica picas, tumbapolvo, lambones y limpia sacos¨ que lo rodean, mientras mas numerosos son, mayor es el sentimiento de que ¨sin ti se hunde este país¨.
Ahora, donde se están rompiendo todos los parámetros de la lógica y la racionalidad es en el llamado PRM (Partido Revolucionario Moderno), porque parece ser un modelo de partido tan avanzado, que va a romper todos los libros de teoría política, comenzando con el axioma de que lo primero es construir un partido para que este sirva de plataforma a quien aspire a un cargo electivo.
Que nosotros sepamos, y nos preciamos de leer todos los periódicos diariamente, ese partido no existe estructuralmente, ya que los intereses y aspiraciones personales a la Presidencia de la República, han impedido la elección de las autoridades que deben servir de árbitros en un proceso electoral interno.
Pero legalmente tampoco existe el PRM, ya que se hace necesario que los que firman por el partido Alianza Social Demócrata, que es quien tiene la personería jurídica y el reconocimiento en la Junta Central Electoral, permita el cambio de nombre y se reconozca a los nuevos directivos que firmarán las asambleas donde se van a elegir los candidatos a cargos electivos, comenzando por la Presidencia de la República.
En este panorama, de "caos y desorden", característica principal de los rebulú-cionarios dominicanos, ya hay tres "dirigentes" aspirando a encabezar la boleta de un partido inexistente desde el punto de vista legal y estructural.
Sin sorpresa para nadie, por su capacidad de charlatanería (charlatán según el diccionario es alguien que ¨habla mucho y sin sentido¨), ni bien comienza el año 2015, ya Hipólito Mejía sale a ¨movilizar las masas¨del PRM antes de anunciar su precandidatura por este ¨partido¨ la próxima semana.
El problema es que el PRM ya tiene un candidato, pues Luis Abinader se hizo elegir por el Partido Humanista Dominicano hace unos días, es decir, de precandidato se convirtió en candidato de otra agrupación política, porque parece que tendrá algún tipo de placer orgásmico verse retratado en una boleta presidencial, no importa el "ventorrillo político" de que se trate.
Por otro lado, la navidad nos trajo como regalo la precandidatura de Ramón Alburquerque, si el de "entren to c....", quien se declaró en contra de Hipólito Mejía y Luis Abinader por principios "ideológicos", ya que según el, estos representan los intereses de las clases poderosas y las empresas dueñas de los medios de producción del país, imagínense ahora volveremos con la palabrería marxista pasada de moda y sin sentido.
Solo en la República Dominicana, un país politizado y fanatizado a extremos insospechados, puede existir un contrasentido como este; tres políticos que existen diciendo que van a ser candidatos de un partido que no existe.

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