Apropósito de la familia (1 de 3)

Nos llama mucho la atención el caso de ese eminente médico psiquiatra Dominicano, Dr. José Ramón Báez Acosta, ciudadano filántropo y ejemplar, ex síndico del Distrito Nacional, el primero en dirigir el cabildo del entonces gran Santo Domingo, luego del derrocamiento del régimen dictatorial de Rafael Leónidas Trujillo Molina, el Dr. Báez Acosta fue en sus días una de las más destacadas figuras de nuestra nación y hoy su nombre se ve penosamente repetido en los tribunales de la república y en su entorno familiar por las dudas que a más de dos años de su partida, muerte o asesinato han generado los comentarios y acusaciones hechas por familiares, amigos y relacionados que presentan posiciones controvertidas con relación a su muerte.

En el interés de unos por proteger, defender y darle un uso legal y justo a los bienes relictos dejados por el extinto Dr. Báez Acosta y el de otros acusados entre sí por adquirir, tener y despilfarrar de manera ilegal, abusiva y fraudulenta esos bienes, llama mucho la atención y abre una caja de pandora ante las acusaciones de sus descendientes directos, de que la partida de su padre fue precipitada o acelerada por la dejadez y marcada negligencia con que actuaron los familiares que tenían bajo su responsabilidad el cuidado de la delicada salud que en sus últimos meses de vida presentaba ese eminente psiquiatra dominicano Dr. José R. Báez Acosta, llegando según las informaciones a la supuesta suspensión del seguro médico internacional de salud que el galeno poseía, bajo los supuestos alegatos de falta de recursos para el pago del mismo así como también el impedimento de ser visitado y tener encuentros a solas con sus hijos aun en su propia residencia.

Apropósito de la familia y en estos momentos en donde es un tema tan debatido en la sociedad dominicana, el relacionado con la violencia intrafamiliar, nos llama a reflexión casos como este en donde los tribunales de la republica han tenido que ser apoderados para dirimir situaciones de índole y competencia familiar, siendo la familia el núcleo de la sociedad.

La partida de este mundo del Dr. Báez Acosta ocupo en sus momentos los titulares de los medios escritos, comentarios radiales y una amplia cobertura en las redes sociales, y no fue por los méritos que adornaban al eminente galeno, que bien merecidos los tenía, sino debido a las acusaciones y contraacusaciones que a raíz de su muerte se generaron entre sus hijos y la que fuera su última esposa, Sra. Ivon Pérez viuda Báez y los hijos con ella procreado, hoy los tribunales de la republica están apoderados de este caso, que ha generado grandes conflictos en todo el entorno familiar del extinto Médico Psiquiatra.