De hecho, algunas personas residentes en esos lugares han sido asaltadas y atracadas por ladrones que aprovechan la oscuridad para cometer sus fechorías.

Según los vecinos, los pillos han sustraído más de 50 bombillas a lo largo de la avenida Hermanas Mirabal, afectando a los residentes de los sectores Baracoa y La Joya.

También sustrajeron luminarias de los antiguos parques Duarte, Plaza Valerio, Ercilia Pepín, y Los Cachases, donde la vigilancia policial es muy limitada actualmente.

Hasta el momento, las autoridades policiales no han detenido a ninguna persona por estos robos, los cuales aumentan la inseguridad de la ciudadanía.

Entretanto, algunas lámparas que se han dañado este año en los parques tampoco han sido sustituidas por las autoridades municipales, lo que hace más notoria la falta de iluminación.

Las visitas a esos lugares, además, se han reducido significativamente, sobre todo, en horas de la noche, por temor a las agresiones y robos por parte de delincuentes.

La escasa iluminación también está siendo aprovechada por homosexuales y prostitutas que acuden a las plazas públicas en busca de clientes.

Fuente: Diariolibre.com