Con voces entre cortadas y miradas que parecen buscar algún refugio, las hermanas Claridad y Yudelki Tolentino reflejan en sus rostros el trauma que les ha tocado vivir desde su niñez. Sólo pueden moverse arrastrándose… según se cree, una extraña enfermedad las ha obligado a permanecer así todo el tiempo.

En una casucha, enclavada en el sector Ondina, en la provincia Hato Mayor, en el este de la Republica Dominicana, sobreviven como Dios les ayuda.

Para su hermano, Juan Antonio Tolentino, todo ocurrió cuando ellas estaban pequeñas. Al parecer, su madre se descuidó con la aplicación de la vacuna del polio.

Pero su mal se empeora más cuando su cuerpo, a rastras en su humilde vivienda, es golpeado por las grietas del piso, al movilizase en sus pequeños espacios, mientras realizan sus quehaceres cotidianos.

A pesar de que nunca han asistido a una escuela, Clairidad y Yudelki saben escribir y pintar. Su anhelo es que alguien les brinde un impulso de ayuda, de manera que puedan desarrollarse y aportar algo a su comunidad y la sociedad dominicana.

Pero hasta que una mano amiga no llegue en auxilio de estas dos jóvenes, tendrán que seguir viviendo como Dios les ayude. Quien desee tenderles una mano amiga, puede hacerlo marcando el número de teléfono: 829-670-9918.

Por: Juan Nina Pilar