Según el último resumen de la Junta Central Electoral (JCE), el ausentismo dentro de los inscritos computados alcanzó un 53.33%, excluyendo a los 870 mil votantes hábiles registrados en el extranjero, la abstención real se sitúa en un 47.82 %.

Frente a este panorama, Betania Figueroa enfatizó la necesidad de que todos los actores políticos y sociales asuman su responsabilidad en la búsqueda de soluciones. "La abstención masiva no debe ser vista como una expresión de apatía, sino como un claro mensaje de descontento y desconfianza hacia el sistema político actual", señaló Figueroa.

Así mismo, instó a promover medidas que fomenten la participación ciudadana, fortalezcan la transparencia y la rendición de cuentas, y generen confianza en las instituciones democráticas. "Es momento de escuchar a la ciudadanía, de trabajar juntos para construir un sistema político más inclusivo y representativo", concluyó.

Betania Figueroa también se unió al informe preliminar presentado por la Misión de Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos (MOE/OEA), que documentó prácticas irregulares durante el proceso electoral. Figueroa expresó su apoyo al llamado de la MOE/OEA para detener la compra de votos y el proselitismo político excesivo en los alrededores de los centros de votación.