Jóvenes se crucifican para exigir que no les destruyan su estadio comunitario

Jóvenes y niños del barrio Arroyo Hondo de esta ciudad de "cruficaron" de manera simbólica en protesta por le inminente desalojo de sus equipos de béisbol del estadio comunitario en donde practican.

En momentos en que la niñez y la juventud carecen de espacios para actividades sanas que los mantengan alejados de los vicios, a la comunidad de Arroyo Hondo le quitarán el único lugar con que cuentan sus muchachos para practicar deportes y fortalecer la organización comunitaria.

"En mi país la niñez tiene fuertes enemigos y muy débiles amigos", rezaba un letrero que colocaron en el estadio a modo de protesta, mientras se colocaban en posición de crucificados en maderos colocados para el reclamo.

Cientos de niños, adolescentes y jóvenes podrían quedarse sin espacio para sus prácticas de béisbol, en el sector de Arroyo Hondo, de concretarse los planes de desalojos de unos inversionistas que alegan que compraron los terrenos.

El estadio comunitario ha servido para la práctica del béisbol y otros deportes desde hace 25 años, según informaron los residentes en Arroyo Hondo.

Ante la amenaza de quedarse sin el único espacio para sus prácticas deportivas, activistas comunitarios han salido a exigir a las autoridades que impidan el desalojo o buscar una opción alternativa para evitar que los jóvenes y niños pierdan un espacio que les permite ejercitarse y crecer sanos.

Según explica la dirigente comunitaria, Ángela Villamán, se trata de unos terrenos, que, pertenecieron al Banco Intercontinental (Baninter), cuyos administradores fueron enjuiciados por fraude.

Los terrenos fueron administrados por el Banco Central, institución que supuestamente los vendió a unas personas que ahora reclaman el espacio.

Para llamar la atención de las autoridades, los activistas del sector de Arroyo Hondo, ubicados, al sur del centro urbano, de Santiago, se han unificado en viacrucis, marchas y misas celebradas en el mismo estadio.