Denuncian cañada es una fuente de contaminacion y mina de mosquitos

Diariamente cientos de personas pasan por lo que se podría llamar el final sur de la calle Duvergé, donde se bifurca hacia las comunidades de El Llano y Boca Canasta.  Aparentemente nadie se percata que allí están dadas las condiciones para que tengamos el mayor criadero de mosquitos posible.

Las aguas de las cunetas desembocan en lo que queda del viejo canal Marcos A. Cabral, un tramo que va desde la avenida Fabio Herrera hasta el punto que señalamos más arriba.   Un increíble foco infeccioso que autoridad alguna ha querido enfrentar.

Recibimos fotos de esto y más de Augusto García, una persona preocupada por el buen desenvolvimiento de Baní y acudimos con él a constactarlo en primera persona.

Pero en ese mismo cuadrante usted se encuentra con un ramal del canal que se dirige a Boca Canasta y se pregunta que como es posible que por ahí pueda correr el agua y si de los famosos 70 millones que una vez dio el presidente para solucionar el problema de riego, no alcanzaron para limpiar esa muestra de una innegable realidad. Pero hay cosas en que se une la ineficiencia con la falta de civismo.

Recorriendo el canal, vacío en ese momento, pudimos observar que el lecho del mismo es el lugar preferido de algunos para arrojar perros muertos.  En las aguas de donde se nutren acueducto de comunidades, desaprensivos se dedican a arrojar animales muertos y cuantas inmundicias sean posibles.

Por cierto en una ocasión el propio Augusto encabezó un operativo para limpiar este lugar de descanso eterno, pero su ejemplo no encontró continuidad de la institución a la que se le envió un mensaje con esta acción, el Ayuntamiento Municipal.