Se ha demostrado que es un mito, el incumplimiento de la ley 166-03 que establece la entrega del 10% del presupuesto general a las corporaciones edilicias, ya que estos reciben grandes sumas de dineros y ni siquiera cumplen con su obligación de recoger y disponer de la basura, ya que este servicio lo tienen contratado con empresas privadas, constituyendo esa práctica un gran negocio que deja anualmente miles de millones de pesos, dejando en manos del gobierno central la solución de las necesidades de los munícipes que ven como sus ejecutivos exhiben la riqueza producida por su paso por la administración municipal.