Varias organizaciones de la Romana celebraron ayer el Día Internacional del Trabajo entre rifas de alimentos y electrodomésticos, así como de reclamos de un incremento general de salarios y el rechazo a la modificación del Código laboral para que sean eliminados algunos derechos adquiridos.

"La lucha de clases no se termina, y tenemos que seguir luchando por nuestros hijos, nuestros nietos", expresó el otrora dirigente sindical Próspero Juan, quien dejó en claro que los salarios de miseria en el país no cubren los artículos de la canasta familiar de las familias de limitados recursos.

Denunció, también, que un sector empresarial condiciona el aumento de los sueltos a la modificación de los 28 artículos del Código Laboral.

Luego, criticó con dureza el hecho de que nadie puede vivir con una pensión de 5 mil pesos mensuales y que, en lo que atañe a ciertas enfermedades catastróficas, el Sistema de Seguridad Social establece topes económicos y no las cubre.

Próspero Juan presentó a las nuevas generaciones al ex diputado Julio González, uno de los fundadores del Sindicato Unido de los Trabajadores del Central Romana, de quien destacó su entrega y fidelidad en su lucha en busca de conquistas y reivindicaciones.