Los propietarios legítimos de la sociedad Costa Dorada, la familia Mayol y la familia Serrano, expresaron temor de que el Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional conozca el juicio en contra de dos de los imputados del fraude, sin esperar los resultados de la apelación presentada ante la Primera Sala de la Corte de Apelación del Distrito Nacional.