Fulgencio Severino reitera a su oposición a la privatización de la salud

La oposición a la privatización de la seguridad social en salud y pensiones data desde el 2001 cuando la Asociación Médica Dominicana realizo marchas al congreso y al palacio y en dos ocasiones fuimos tiroteado por la policía nacional y desde entonces he participado activamente. 

Los efectos que hoy observamos en la aplicación de la ley 87-01 nos dan las razones a nuestra oposición y la lucha continuara hasta lograr el derecho a la salud de la población dominicana de forma gratuita e ilimitada y el pago justo a los profesionales de la salud.

Cuando en febrero del 2001 arribamos a un acuerdo con el gobierno de Hipólito Mejía, incluimos: La creación del Seguro Nacional de Salud con una población fija a través del artículo 31, la garantía de pensiones a los empleados públicos a través de la Ley 379-81 en el artículo 38 de la Ley 87-01, la no discriminación de trabajadores con la privatización a través del artículo 173, párrafo 3, la permanencia de los hospitales públicos a través del artículo 31 estableciendo que la población del régimen subsidiado debía ser atendido en hospitales estatalesy la prohibición de que las ARS pudieran tener hospitales y centros privados. 

Además, en el artículo 39 acordamos que cuando un trabajador no alcanzará una pensión el Gobierno se la completaría.

La mayoría de esos acuerdos han sidoviolados por el Gobierno, empresarios, sindicalistas tradicionales, Consejo Nacional de Seguridad Socialy por las intermediarias que a 20 años de iniciado el sistema de pensiones y 15 años del Seguro Familiar de Salud se   han embolsillado miles de millones de pesos a costa delos trabajadores.

Es imposible que una persona consciente y formado en valores de justicia y solidaridad permanezca indiferente frente a la mafia que aumenta sus riquezas a costa del empobrecimiento de trabajadores y trabajadoras.

Desde el gremio de la salud hemos podido expresar nuestro compromiso con los derechos fundamentales del pueblo dominicano, sin dobleces ni conflictos de intereses, porque hemo aprendido a vivir con humildad y trabajo y rechazando la vanidad, las ambiciones y la avaricia.

Los acuerdos de febrero del 2001 y las demandas de hoy expresan, que diferente a muchos sectores, el CMD y los profesionales que encabezamos esa lucha, actuamos pensando en el bienestar común, pues mucho desearían estar en el lugar de la comisión para utilizar sus influencias en beneficios particulares, pero los valores en lo que nos hemos formado y hemos contribuido a forjarlos en los estatutos del colegio médico dominicano, nos impulsan a ser cada día más compromisario con el bienestar del pueblo dominicano.

Son los valores de justicia y solidaridad lo que nos impulsan a abrazar el pensamiento político más avanzado de los pueblos, denominado de izquierda, pues la derecha es corrupta, ambiciosa, avariciosa, vanidosa, insaciable y utiliza la actividad política para satisfacer esas perversidades humanas es decir para beneficios personales y no colectivos, enfatizo el Dr. Fulgencio Severino

Esos mismos valores nos comprometen a servir desde posiciones de trabajo, como el hospital, docencia y gremios profesionales sin mayores pretensiones de recompensas, dijo el Dr. Severino.

Desde la posición como director de Cardiologia del hospital Dr. Salvador B. Gautier expreso esos valores y combino la lucha por mayor inversión en el hospital con la realización de actividades científicas con el apoyo de la industria farmacéutica para comprar equipo para dicho centro de salud y así lo hemos hecho desde 2008 hasta la fecha.

Igualmente, desde la sociedad dominicana de Cardiologia hemos impulsado programas en favor de tratamiento efectivo para pacientes con enfermedades cardiovasculares y desde el 2014 dirijo el programa de tratamiento trombolítico a pacientes con infarto agudo del miocardio.

Me siento orgulloso de que durante años algunas directivas del CMD me han considerado para ser parte de su equipo negociador tanto para el tema de seguridad social como reajuste salarial. Esas consideraciones talvez son producto de que nunca he aspirado a ser presidente del CMD y a que dispongo de informaciones y análisis sobre la realidad social y médica del país debido a mi formación como investigador y estudioso de Cardiologia y Medicina.

Debemos reiterar que la intermediación es un obstáculo al derecho a la salud y las pensiones del pueblo dominicano. Que el apoyo que da el actual gobierno privatizador a esos sectores se entiende por la condición de empresario del actual presidente de la República, pero el pueblo trabajador deberá desmontar ese y otros modelos de privatización como los Fideicomisos, las Alianzas Públicas Privadas porque son formas vulgares del sector privado de apropiarse de recursos públicos.

Quienes actuamos a nombre del CMD y sus sociedades médicas especializadas estamos convencidos de que las demandas son justas y beneficiosas para los profesionales de la salud y la población dominicana, y son las siguientes:

Es inaceptable que el Consejo Nacional de Seguridad Social aprobara 5,500 millones de pesos en beneficios de las ARS e igual en octubre del 2021, a los trabajadores y pacientes le niegan mejorar sus tarifas y el acceso a servicios de salud.

Este modelo de complicidad de los gobiernos anteriores y el actual quienes siendo parte del Consejo Nacional de la Seguridad Social se confabulan para actuar en beneficio de la intermediación y cuando hay que buscar dinero del presupuesto para garantizar esos beneficios no vacilan y así ocurrió con la pandemia.