Eso digo yo de Dagoberto Tejada Ortiz

Por eso, el Estado y las instituciones que lo componen serán siempre abstracciones, armazones y esquemas que tendrán el sentido particular de los elementos humanos que lo constituyen junto al movimiento generado por sus acciones.

Hay personas que se convierten en instituciones e instituciones en estructuras despersonalizadas.

Hay personas que rompen límites y otras que ponen barreras.

Hay gente que se expande como el universo y visiones que apuestan a consumirse como estrellas apagadas en un hoyo negro.

Y hay gente también, que brilla con luz propia, que siembra y deja huellas, definiendo espacios, referentes de los cuales no puede prescindir la historia.

Dagoberto Tejeda es una de ellas, uno de esos íconos definitivos de la cultura dominicana, aunque el Instituto del Folklore, uno de los espacios físicos que concibió, está cerrado por falta de recursos económicos.

Visité en días pasados ese paradigmático lugar museográfico y sentí un gran dolor.

Pero más allá de este capítulo, Dagoberto Tejeda es un referente obligado de nuestra cultura, sus aportes están ahí, como lo demuestra su último libro "Identidad y Magia", una notable y bellísima investigación sobre nuestros bailes folclóricos.

Mi respeto y admiración de siempre para el hermano, amigo y gran maestro Dagoberto Tejeda Ortíz.