Publicidad

La ambición mató al Ratón

La ignorancia, muchas veces contribuye a que los políticos se sirvan con la cuchara grande para conquistar intereses a cualquier costa aunque tengan que venderle el alma al diablo para defenderse de ciertas acusaciones, confundir a los sencibles y convertir en hechos confiables la ambición que corrompe a los líderes dominicanos, donde ya nisiquiera las organizaciones de izquierda tienen garatía absoluta de confiabilidad.

 

La turba de partidos que buscan reconocimiento en la JCE (Junta Central Electoral), de un tiempo a esta parte, no es con fines electoralistas y alternativas de solución a los problemas que afectan el estado dominicano, sino más bién, tocar parte del pastel que se reparte para llevar a cabo la campaña política, recursos propiedad del estado.

Todo esto es el producto de partidos políticos corruptos con escuelas preparadas en cátedras normatizadas sobre robos ilícitos de los bienes del estado, impuestas por vagos inmunes al trabajo permanente que son como las máquinas tragamonedas, pero como "la ambición mató al ratón", esos trogloditas convertidos en aves carroñeras hoy en día están siendo desenmascados por los votantes sensatos, moralistas e interesados en la estabilidad del pais.

Los actos dolosos registrados en los cuatro poderes del estado, han reducido al máximo la inversión extranjera, porque cuando los interesados solicitan apoyo de los congresistas, lo primero que reciben son propuestas indecentes, violatorias a las leyes de inversión; y por consiguiente, incursivas en el lambonismo de curules, donde generalmente no se aprueban los proyectos si no se aparece con el maletín cargado de dinero para comprar su aprobación.

"En República Dominicana, por más interés que se tenga en contribuir con el desarrollo económico, a través de la inversión extranjera, todo se mueve con dinero", me decía un amigo en Estados Unidos, y esto ha sido impuesto por la alta dirigencia de los partidos políticos, dirigidos principalmente por los partidos de turno, que se han encargado de enrriquecer ilegalmente a cientos de sus correligionarios y seguidores.

Las acusaciones contra expresidente de la república y a algunos de sus funcionarios, registradas en los últimos meses, son reflexiones para la meditación a puertas cerradas, porque constituye una verguenza para los dominicanos con dignidad y apego al respeto de los valores democráticos y de los símbolos patrios que un ex gobernante educado por los principios politicos-literarios del profesor Juan Bosch, sea acusado de usar dinero del narcotráfico para la campaña política.

Estamos claro, "el bombero no se hala la manguera" y en la guerra "los aliados no se combaten", sin embargo, los principios y la protección de un país están por encima de cualquier defensa. Una acusación como esta, que hoy en dia recorre el mundo a través del bombardeo sistemático generado en los medios electrónicos, escritos y las redes sociales, son pruebas más que suficientes para que la Procuraduría General de la República comience a investigar. A caso eso no será posible?.

En adición a toda esta barahunda de acusaciones, el expresidente dice textualmente que las mismas son el producto de su popularidad de cara a las elecciones del 2016. No lo descartamos de golpe y porrazos, sin embargo, tantos dominicanos no pueden estar equivocados, porque el sentir popular de los verdaderos demócratas, es que a este pichón de dictador, apoyado por grandes beneficiarios de sus gobiernos, no se le puede dar la oportunidad de gobernar el país por un próximo período.

"El respeto al derecho ajeno es paz", dijo Benito Juarez, pero "los pueblos que no recuerdan su historia, están supeditados a repetirla" y cada ser humano tiene todo el derecho de pronunciarse a favor de su "lider", siempre que sus principios no les sean bulnerados por intereses putrefactos que a cuenta gotas no son de importancia para su salvoconducto.

Leonel Fernández es el resultado de una escuela moralista creada por Juan Bosch y que al no darle resultado, por sus positivos principios, decidió cabalgar en la universidad dictatorial balaguerista para poder llegar al poder y convertirse en autor intelectual del mayor crímen político de los últimos períodos.

El mundo ha cambiado y estamos en un momento de innovación en todos los sentidos, razón por la cual, la justicia debe jugar un papel acorde con los principios, la moral, las leyes y las demandas perenne de sus ciudadanos fomentando una cultura de tolerancia apegada a la verdad.

La defensa a quien no se la ha ganado no tiene el mayor ápice de validez (MB), mucho más importante es ser tolerante diciendo la verdad ante el fracaso premeditado de los demás".

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Información adicional

volver arriba

Secciones

Noticias Regionales

Nosotros

Síguenos

MunicipiosAlDia Alianzas

Consola de depuración de Joomla!

Sesión

Información del perfil

Uso de la memoria

Consultas de la base de datos